Es un soporte de mesa ideal para mesas de conferencias o reuniones. Lo suficientemente pesado para mantener la estabilidad, y con un botón de encendido y apagado.
Cuando el micro está encendido, se enciende una luz roja. Al volver a pulsar, la luz roja se apaga y se encienda una amarilla. Me hubiese gustado más que la luz al encender el micrófono fuese verde, pero bueno, así tampoco está mal.
Funciona sin problemas con micrófonos dinámicos y de condensador, y parece hecho de forma que pueda durar muchos años.
Lo recomiendo totalmente, sobre todo comparándolo con otros modelos inferiores, que resultan más toscos y de peor calidad.